miércoles, 16 de septiembre de 2015

¡UNA ESPAÑA FUERTE Y UNIDA!


El españolismo del líder afroamericano emocionó a nuestro monarca


En el encuentro, ayer, entre S.M. Don Felipe y el Presidente de Estados Unidos, este declaró solemnemente: “Estamos profundamente comprometidos a mantener la relación con una España fuerte y unida”, en fina alusión a las elecciones catalanas de la semana que viene.

Grande y unida. Casi lloro de la emoción. ¡Ni José Antonio Primo de Rivera!

Estas declaraciones se enmarcan en la intensa campaña de Rajoy para recabar apoyos internacionales a la unidad española frente al dislate separatista. En un sentido similar, aunque en tono más aséptico, se pronunciaba a principios de mes la canciller alemana Ángela Merkel: “Los tratados de la UE garantizan la soberanía y la integridad territorial de cada estado" (…) “Es muy importante que se respete la legalidad internacional”.

A uno le entran tentaciones de agradecer a los dos grandes mandatarios sus hermosos gestos a favor de la incolumidad de nuestro territorio, pero igual habría que preguntarse hasta qué punto son sinceras y desinteresadas sus rimbombantes declaraciones, máxime cuando ninguno de ellos tiene la más mínima noción (ni interés en adquirirla) sobre la trayectoria histórica de los condados catalanes y de la Corona de Aragón, y además se trata de un asunto de estricta política interna.

No puede obviarse que nuestras importaciones procedentes de los Estados Unidos han repuntado en los últimos tres años y que las inversiones españolas en compañías gringas han experimentado un reciente y extraordinario crecimiento que se espera que continúe. La súper potencia norteamericana es también la primera inversora extracomunitaria en nuestro maltrecho país, con el 13% del total.

En definitiva, sería pecar de ingenuos (por emplear un término neutro y biensonante) suponer que las encendidas palabras del negrito Barack nos van a salir gratis. Mi intuición me advierte que no son más que la contraprestación al gobierno español por algún acuerdo comercial especialmente suculento para el Tío Sam.

Y Alemania, parecido.

Tengamos muy clarito que si la región de Cataluña se acabara segregando de España -Dios no lo quiera y los buenos españoles no lo permitan- , los yanquis y los germanos no tendrían el menor empacho en reconocer el nuevo estado catalán independiente. Todo dependería una vez más de cómo les salieran las cuentas.

3 comentarios:

alco dijo...

El pago será (creo yo) militar, cuando empiece la intervención de la OTAN en la guerra en Oriente Medio. Supongo que será un uso intensivo de las bases aeronavales, aportar unas fragatas y cazas, y si lo piden enviar fuerzas terrestres. Más o menos como en la guera de la OTAN contra Serbia por lo de Kosovo, Una guerra muy injusta, en mi opinión hicimos una guarrada a los serbios secesionando su patria.
Ahora puede ser muy complicado, también están implicados directamente Rusia e Irán apoyando al régimen sirio y no sabemos que van a hacer los erráticos americanos (y la OTAN). Probablemente equivocarse como hicieron en Iraq y en Libia.

Teutates dijo...

Yo también creo que los intereses de Estados Unidos son militares, o simplemente no quedar a mal con España, socio suyo de la OTAN. Tampoco interesa a ningún país occidental que aquí en España andemos a la gresca, la posibilidad de meter los tanques en Cataluña si declaran unilateralmente la independencia es real. Esto afectaría negativamente a la economía y a la estabilidad de todos los países de Europa y de Estados Unidos.

Al Neri dijo...

Buenos análisis, señores, y totalmente de acuerdo con la opinión de Alco sobre la guerra de los Balcanes.