viernes, 18 de febrero de 2011

CUATRO REFRANES

Aquí hablo mucho de los defectos femeninos en una especie de pose misógina que solo me creo a ratos, porque en el fondo ellas me han dado muchas lecciones, a veces poco agradables pero siempre útiles.

Por ejemplo, siempre digo que los baches más tristes de mi escueta biografía sentimental se simbolizan en cuatro refranes castellanos que me soltaron sin compasión chicas que me quisieron y me conocieron bien. No voy a explicar en qué contextos y por qué motivos me los recitaron, pero me impresionó mucho oírlos en su día y ya digo que resumen momentos importantes pero que me entristece recordar.

Con alguno a lo mejor dieron
en el clavo.

“De las aguas mansas líbrame, Señor, que de las bravas me libro yo”

“Quieres cambiar un burro por un pollino”

“Obras son amores y no buenas razones”

“Te da igual Juana
que su hermana”

No os aventuréis en las interpretaciones
...

18 comentarios:

que dificil la vida sin ti dijo...

¡Que cosas más feas le han dicho, Al!, me cuesta creer que se las merezca, así que para compensarle yo también le dejo un refrán, pero con ánimo agradable, casi un piropo:
"Perro ladrador, poco mordedor..."
Le conozco únicamente por sus post y comentarios pero ¿a que no voy desencaminada? :-D

Aprendiz de brujo dijo...

Es que de verdad, reprochar es algo muy femenino.Lo digo completamente convencido
Las mujeres son cirujanas del reproche.
Ya , ya sé que es muy simple muy comentario; que es generalizar., que patatín patatán
Las mujeres valen más que nosotros para casi todo,y para reprochar no digamos.

Anónimo dijo...

Y si alguna contesta a AdB malhumorada le estará dando la razón, así que a callar todas.

alco dijo...

Por lo menos la primera frase es muy inteligente “De las aguas mansas, líbrame, Señor, que de las bravas me libro yo”.
Desde hace mucho tiempo sé que con las mujeres y con la policía de tráfico no hay que discutir nunca, es un pulso perdido. Así que se hace como si uno acatara, les das la razón, y cuando pasa el chaparrón se sigue haciendo lo que se hacía si se estima adecuado.
Sra Perroviejo, Ud tiene mucho sentido común, sus comentarios siempre me han gustado.

Anónimo dijo...

Mi frase favorita:
"Te lo dijeee..."

Aprendiz de brujo dijo...

Nagore hay dos encabezamientos argumentales muy femeninos:
te lo dije...
ya sabía yo que...

Y no digo más

Aprendiz dijo...

Es verdad que el reproche es algo muy femenino, pero qué sería entonces de esta vida. El motivo de esto es como dicen los hombres; las mujeres siempre vamos por delante, y es que vemos las consecuencias antes siquiera de haber hecho algo, por eso avisamos cuando todavía hay tiempo, el hombre acaba haciendo lo que quiere, y nosotras reprochamos porque lo avisamos.
El "te lo dije" que dice Nagore.

Estoy segura Al Neri, que te merecías bien esos reproches, e incluso mas! ;-)

Anónimo dijo...

No se corte AdB, hombre! que tiene usted toda la razón...
El reproche es el síntoma inequívoco de que jamás perdonamos, o al menos nunca, nunca olvidamos.
Si alguna vez a un hombre se le ocurre llegar "pispli" a su casa despues de una cena con los amigotes, no hay duda de que no solo se lo recordará al dia siguiente su posible hernia de hiato, si no tambien su mujer el resto de su vida:
- aquel dia que viniste a las tantas... etc.etc.

Somos listas, sí...porque a veces les dejamos decidir. Si nos implicaramos más en ciertas decisiones, el reproche sería al 50% o hacia nosotras por completo.
Pero claro, mejor que se equivoque él solito...

Al Neri dijo...

Un antiguo compañero de trabajo del que ya hablaré alguna vez, porque da para algunas anécdotas muy jugosas, solía contar un episodio de su niñez que es muy clarificador sobre la forma de ser de las mujeres.

De niño vivía con su familia en un barrio popular de mi ciudad, en una casa antigua con las paredes tan delgadas que se oía todo.

Recordaba nítidamente como todas las madrugadas de su infancia escuchaba a su vecino de arriba, un fumador empedernido y compulsivo, levantarse para ir a la fábrica tosiendo estrepitosamente y durante mucho tiempo.

Entre tos y tos podía oirse la voz aguda y machacona, como un martillo, de su mujer rezongando: "¿Qué?, ¿no te fumas ahora un cigarrito?

Álex dijo...

Ya saben que yo no estoy muy de acuerdo con esto de hablar de mujeres y de hombres como si fuéramos seres diferentes.
Para variar, voy a estar en desacuerdo con el sr. Aprendiz de Brujo, porque los reproches y las frases iniciadas con el "te lo dije" o "ya sabía yo que" son tan habituales en mujeres como en hombres, aunque quizá no las recibamos de la misma manera. En mi caso, creo que a quien más se las he oido pronunciar (no necesariamente dirigidas a mi) es a mi padre.
Así que yo insisto en que, habiendo cosas más habituales en hombres o en mujeres, las características creo que van más asociadas a las personas y sus situaciones.

Respecto a los cuatro refranes, sr. Neri, es de suponer que si le impactaron tanto es porque dieron en el clavo o justamente por todo lo contrario: a veces lo que más entristece es que alguien que se supone que nos conoce y nos quiere, meta la pata hasta el fondo al valorarnos.
Me parecen momentos muy intensos y hermosos esas situaciones a las que usted hace referencia, en las que alguien, queriendo o sin querer, nos pone inesperadamente frente a nosotros mismos
sólo con una frase, un gesto, una actitud... Momentos que efectivamente se nos quedan grabados porque remueven nuestros cimientos y eso creo que siempre, a la larga, es positivo.

que dificil la vida sin ti dijo...

La bruja sarcástica que hería a su marido enfermo doblemente: de tabaquismo y de bronquitis, perdone Al, pero me niego a aceptar que sea
un referente "sobre la forma de ser de las mujeres".
Es un ejemplo de mala persona, amén de matrimonio muy mal avenido.
No soy ninguna santa - estoy muy lejos - pero no me reconozco en absoluto en ese maligno comentario que me averguenza lo pronunciara una miembra (según Leire) de mi "bello" y noble, si nos lo proponemos, como los varones, sexo.
¡Muy feliz fin de semana!

sefo dijo...

Entiendo más o menos porque te pudieron decir dos refranes pero el del pollino y el de las aguas bravas no lo pillo.
Asunción, la mujer del fumador que le decía quieres un cigarrillo yo no creo que sea mala, era solo para que se diera cuenta de lo malo que era fumar, claro que si se lo decía todos los días cuando peor lo pasaba el hombre, pues tampoco es muy oportuno.

El Subdirector del Banco Arús dijo...

Puff!!! Generalmente me dicen cosas mucho peores.

Aprendiz de brujo dijo...

Joder Nagore, tu también con el "usted"...hombre si es por mantener distancia de se guridad con mi ímpetu ante las damas, lo llegaría a entender. Si es por secundar la política viperina o por cualquier otro motivo que no sea el aludido...me das un disgusto serio.
Esto de llamarnos de usted entre jóvenes me da mucha risa, pero bueno cada uno es libre de elegir su forma de dirigirse a los demás.
Un saludo muy respetuoso

Al Neri dijo...

Cuéntelas, Subdire, que serán muy jugosas. Pero como las chicas refraneras no hay nada.

Anónimo dijo...

737 kilómetros creo... fíjese si guardamos las distancias, ja, ja, ja... tambien dispongo de otros medios más eficaces para salvaguardar mi honra, jajaja...

Ese ímpetu guerrero tambien lo ha empleado usted ante las damas para defenderlas y eso dice mucho. No es ningún bufón. ;)

Eres un sol!!!

Dulcinea dijo...

Hombre, si te lo dijeron con refranes muy cabreadas no estarían.

Hombre ya está el aprendiz de brujo y maestro de lujuria apuntando a otro objetivo. Ten cuidado, nagore, que en pocos posts ya estará haciéndote insinuaciones sucias.

Aprendiz de brujo dijo...

Gracias Nagore por tu amabilidad.730 km no son nada..., al lado de un buen revés verbal.
Tú, si que eres un encanto.No hagas caso a Dulci que te tengo un respeto reverencial.

Dulci nadie me había dicho algo tan hermoso en mi vida...Maestro en lujuria.Ojalá fuera así, de verdad.
Y no te me pongas celosona, tonta..."De sobra sabes que eres la primera...".